La
encuesta de población activa del cuarto trimestre refleja un descenso de la
tasa de paro de Almería desde el 36,60% existente a finales de 2012 al 36,28%
al finalizar 2013. Exacto, es lo que están pensando, tres décimas de reducción
en doce meses. Por desgracia aún es superior en 1,5 puntos a la que existía al
finalizar 2011. Un cálculo rápido nos diría que, de seguir con este ritmo de
recuperación hasta 2017 no tendríamos la tasa de paro que existía en Almería
cuando el actual gobierno tomó posesión. Un largo viaje para volver a la
casilla de salida.
Bromas
aparte, lo que estamos viendo, y que refrenda los datos que mes a mes se
conocen de afiliación a la Seguridad Social y de desempleo registrado, es que
la tasa de paro se estabiliza, tanto en España como en Almería, que es lo que
analizamos, que la reducción del paro no será rápida y que una parte de los
desempleados actuales no volverán a trabajar. Esta afirmación se lleva diciendo
desde que se inició la crisis, sin que se haya actuado en consecuencia, más
bien al contrario. Cuestiona, y mucho, el sentido de ética ciudadana de quienes
sabiendo que una parte de los desempleados, concretamente mayores de de 50 años
procedentes de la Construcción no volverán a trabajar. No hay más que ver que a
finales de 2007 el 20% de los trabajadores estaban empleados en la Construcción
y hoy, con 100.000 parados más, este sector emplea a sólo el 3,9% de los que
tienen trabajo. ¿De dónde se va a sacar un empleo para esos 100.000
conciudadanos más los que se incorporen, por edad, al mercado laboral. Siendo
conscientes de ello, me parece que
cuestiona mucho la ética política de quienes ofrecen como respuesta endurecer y
dificultar el acceso a la protección por desempleo y, en consecuencia, las futuras
pensiones, de estas personas.
El
foco de atención se ha puesto en la reducción del paro en 8.000 personas en
2013. ¿Cómo es posible que el paro baje en 8.000 personas y la tasa de paro no
se mueva? La respuesta nos la ofrece el dato de población activa, esto es, las
personas que trabajan o buscan empleo. Esta y la población en edad laboral ha
descendido a niveles de 2008. Me explico. Almería tiene ahora una población
activa formada por 355.000 personas, 16.700 menos que hace un año. Es decir,
para que el paro baje
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